Reseña: Mi perfecto sapo azul

Título: Mi perfecto sapo azul
Autor: Silvia García Ruiz
Serie/Saga: Serie Los hermanos Lowell
Género: Romántica, Contemporánea
Editorial: Booket
Páginas: 320
SinopsisUna divertida comedia romántica que nos recuerda que los príncipes azules sí existen.
Elisabeth Lowell y Alan Taylor se declararon la guerra desde pequeños. En cuanto se conocieron se convirtieron en acérrimos enemigos, pues ella es «Doña Perfecta» y él un niño un tanto salvaje.
Pero ¿qué ocurre cuando los niños crecen y Alan se da cuenta de que Elisabeth es su mujer ideal? Pues que Doña Perfecta le presenta una lista con las cualidades que debe tener su perfecto príncipe azul.
¿Conseguirá Alan cumplir con todos los requisitos? ¿Aparecerá el hombre perfecto en la vida de Elisabeth antes de que él consiga enamorarla? ¿Logrará finalmente convertirse en un príncipe o por el contrario continuará siendo un perfecto sapo azul?


Elisabeth era siempre perfecta y educada; Alan, un niño revoltoso como cualquier otro; pero cuando se juntaban esos dos en algún evento o celebración, inevitablemente ocurría algo; de hecho, siempre que estaban cerca, estallaba la guerra.

Lo primero que voy a decir es que este libro ha sido genial. Lo leí durante los exámenes como lectura ligera y no podría haber elegido un libro mejor. Me sacó de mi parón lector y además me reí muchísimo.

Esta novela se centra en Elizabeth y Alan. Elisabeth es una niña muy educada, hasta el punto que es conocida como Doña Perfecta en el pueblo. Alan es su nuevo vecino y es todo lo contrario a ella, un niño travieso, juguetón, risueño y que la saca siempre de quicio. Es el único que consigue quitarle esa actitud de niña perfecta y para diversión nuestra, es lo que más le gusta hacer a Alan.

- Perdona, Elisabeth, no debí dejar calva a tu muñeca -dijo con un brillo de satisfacción en los ojos.

- Perdona, Alan, no debí dejarte calvo a ti -contestó Elisabeth sin dejar de sonreírle.

Una de las cosas que más me han gustado ha sido poder disfrutar de estos dos personajes desde que eran pequeños. Vemos toda su evolución, todas sus guerrillas y sus reconciliaciones, desde que tenían 8 años. Sus piques empiezan al minuto de conocerse y será el motor de toda la historia.


- ¡Por favor, sacrificad de una maldita vez a ese animal moribundo que está sufriendo! -gritó Alan por la ventana, señalándonos.

- ¡No somos ningún animal moribundo, somos un grupo de exploradoras y todas nosotras estamos en el coro del colegio! -le contesté indignada.

- Ahora lo entiendo -contestó Alan pensativo.
- ¿El qué? -pregunté confusa cayendo en su trampa.
- Por qué el profesor de música es sordo, seguro fue después de oírte cantar -me acusó vilmente entre las carcajadas de mis amigas.


La relación que hay entre ellos me ha encantado desde el principio. Es una relación amor-odio. Están todo el día picándose, peleándose y no se pueden ni ver, pero si alguno tiene un problema ahí estará el otro para ayudarle, darle su apoyo, y si hace falta matar a alguien y esconder el cuerpo.

Pero aunque estos dos sean nuestros protagonistas, no podemos olvidarnos de los personajes secundarios. En realidad todos en el pueblo ponen su granito de arena en esta historia, pero con los que mejor me lo he pasado han sido Josh y Dan, los hermanos de Elisabeth, y su padre John. Estos tres han protagonizado varias escenas cómicas, ya sea por la personalidad del padre, las charlas y gamberradas con los hermanos o el conjunto de una familia que a veces parecía algo loca.

- Dios, por favor, que vuelva a casa despotricando del vecino y no con una sonrisa radiante de "me he besado con un joven adolescente y quiero más" -rezó John Lowell antes de que la puerta de su casa se abriera con brusquedad y su hija entrara descalza y gritando.
- ¡Odio a Alan Taylor y no pienso volver a ir a ningún estúpido baile con chico alguno! ¡De hecho, no pienso salir con ningún chico! ¡Nunca!

El problema de verdad empieza cuando Alan se da cuenta de que quiere estar con Elisabeth, que quiere ser algo más que su amigo, pero ella le ponte delante de las narices una lista con 10 puntos que debe cumplir su hombre perfecto, su príncipe azul. ¡Y menuda lista! Si quiere tener algo con ELisabeth deberá encontrar la forma de satisfacer esos 10 puntos, ¿el problema? (siempre hay un problema) Que la lista ha sido creada para ser lo opuesto de Alan. ¿Conseguirá completar todos los puntos de esa dichosa lista?

- ¿Dónde está la víctima?
- ¿Qué víctima? -respondió con extrañeza Milisent.

- Elisabeth me ha llamado diciendo que escuchaba unos berridos infernales que provenían de aquí, que no sabía distinguir si eran de hombre o de mujer, pero aseguraba que por el sonido lo más seguro era que estaban torturando a alguien.

- Ah, sí, eso era mi nieto cantando -explicó Milisent entre risas mientras señalaba a los muchachos en el jardín de su vecina.

Tengo que admitir que la chica al final me sacó un poco de quicio, pero luego lo compensó haciéndome reír en escenas posteriores xD Y el final... es de esos finales que te hacen reír y cuando cierras el libro te dejan con una sonrisa en la cara 😍

Sólo puedo decir que he disfrutado muchísimo de esta historia, no ha habido página en la que no me haya reído, no sólo con los protagonistas, sino con el padre de Elisabeth, sus hermanos o el pueblo entero. Obviamente, Alan ya se ha ganado un sitio en mi corazón y estoy deseando leer las historia de los hermanos de Elisabeth ^^

4/5 --> Me ha encantado. Ha sido una lectura
muy fresca y divertida ❤️
Siguiente libro en la serie: 

Una heredera con muy malas pulgas
(Historia de Dan)

3 comentarios:

  1. No tengo demasiada información sobre estos libros pero tras tu reseña y ver quién es la autora me encantaría animarme con ellos. Un besote :)

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  2. ¡Hola! A mí también me encantó el libro, lo leí hace un tiempito y me acuerdo que me hizo reír mucho, mi único problema fue Elizabeth que me resultó insoportable muchas veces, pero la ternura y la diversión de Alan lo compensaban

    Besotes

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  3. Hola!! Pues yo también leí el libro y en sí lo amé, me encantó.

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